Si querés sumar una planta que le dé mucho color y vida a tu terraza o balcón, que te regale flores durante buena parte del año y que además no te demande cuidados complicados, hay una especie que deberías conocer: se llama Penta lanceolata, originaria de África y suele ser reconocida simplemente por sus flores con forma de estrella.
Conocida como Flor estrella, es una especie que se adapta muy bien a macetas grandes o canteros, y en poco tiempo forma una mata frondosa que puede llegar al metro de ancho. Si vivís en una zona con clima templado, como en gran parte de Argentina, puede florecer en tu jardín desde la primavera hasta casi el final del otoño.
Penta lanceolata: el arbusto ideal para tu terraza o balcón
Una de las grandes ventajas de este arbusto es su versatilidad. No necesita un parque ni un gran jardín: basta con un rincón con buen sol para que crezca sana y llena de flores. Su porte compacto permite ubicarla en macetas individuales, jardineras largas o incluso al pie de otras especies más altas, ya que no compite agresivamente por el espacio.
En climas como los de Buenos Aires, Rosario o Córdoba, la flor estrella se adapta perfectamente a vivir a la intemperie durante varios meses. Sin embargo, en zonas donde el invierno se hace sentir, conviene tenerla en una maceta que pueda trasladarse al interior. Durante esa etapa, lo más importante es ubicarla en un lugar luminoso, como al lado de una ventana, para que no pierda fuerza ni color.
Además de ser decorativa por el color de sus flores, tiene ese encanto de las plantas que parecen delicadas, pero son mucho más fuertes de lo que aparentan. Tolera bien el calor intenso, y aunque se toma un descanso en invierno, no se rinde fácilmente.

Claves para que la Flor de Estrella crezca
Pequeños gestos como elegir bien el lugar donde ubicarla o ajustar el riego según la estación pueden marcar la diferencia en la cantidad y duración de su floración. Con estas recomendaciones simples, vas a lograr que crezca sana, fuerte y llena de flores durante meses.
- Sol directo: para que la Penta lanceolata mantenga su ritmo de floración, necesita mínimo seis horas de sol por día. Cuanto más sol reciba, más flores va a dar.
- Riego equilibrado: durante la temporada cálida y de floración, se recomienda regarla con frecuencia pero sin encharcar. El exceso de agua puede afectar sus raíces.

- Sustrato con nutrientes: un buen sustrato hace la diferencia. Agregar humus de lombriz al momento del trasplante o cada tanto durante la temporada de crecimiento ayuda a que se mantenga vigorosa.
- Protección en invierno: si la planta está en una zona de heladas, lo ideal es trasladarla al interior o resguardarla en un lugar protegido del frío. Aunque parezca que se seca, no hay que desecharla: rebrota cuando mejora el clima.
Las Pentas lanceolata no solo aportan belleza con sus flores constantes, sino que también ayudan a crear un pequeño ecosistema en terrazas y balcones. Si todavía no la conocías, tal vez sea el momento de sumarla a tu colección verde.
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