Las estadísticas del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) revelaron el tremendo impacto que generó el cese de cosecha que impulsaron los productores en reclamo de mejores precios por la materia prima. El primer trimestre de 2025 cerró con sólo 65.018.623 kilos de hoja verde procesados por los secaderos, muy lejos de los 135,5 millones de kilos del mismo período del año pasado.
Históricamente enero y febrero suelen ser meses de poca cosecha por las altas temperaturas, pero en marzo el ingreso de yerba mate a las plantas elaboradoras crece exponencialmente, algo que no sucedió este año. El mes pasado ingresaron a los secaderos 31.394.469 kilos de materia prima, , frente a poco más de 80,6 millones de kilos de marzo de 2024.
Un productor sostuvo que los yerbateros siguen con el freno de mano puesto porque son pocos los industriales que elevaron a 300 pesos el kilo de yerba puesta en secadero. “Esta situación es crisis para el presente y el futuro porque son millones de pesos que dejan de circular en la economía de Misiones, miles de personas que no están trabajando en la cosecha. Pero también va a impactar en la venta de fertilizantes, en la limpieza de los yerbales”, advirtió.
“Hay muchos productores dispuestos a no cosechar si no mejoran los precios, es una realidad. Y si deciden hacerlo más adelante, nos vamos a encontrar con un cuello de botella: no se va a poder procesar todo”, agregó. El productor advirtió que “en abril los números no son mejores. Es cuestión de salir a la ruta y ver que no hay camiones circulando con yerba”, afirmó.
“El impacto de la crisis en el sector yerbatero se va a sentir en los próximos meses. Los productores no pueden sentarse a negociar paritarias con los gremios porque con estos valores que se están pagando, por debajo del costo de producción establecido por el INYM, no permiten pagar mejor al cosechero, el secadero que no tiene suficiente materia prima opera dos o tres veces a la semana porque los costos son elevados. El bajo volumen de hoja verde cosechada impacta a todos”, explicó el yerbatero que, además, realiza servicios de cosecha para terceros.
La decisión de algunos industriales de llevar a 300 e incluso 305 pesos el kilo de hoja verde de yerba puesta en secadero aplacó los ánimos de los productores que desde fines del año pasado estaban instalados en las principales rutas y durante casi una semana bloquearon el a las casillas de cobro de la Agencia Tributaria de Misiones (ATM).
Los productores insisten en que el Gobierno Nacional designe al presidente del directorio del INYM para que vuelvan las sesiones de precios, tal como sucedió entre 2002 y fines de 2023. Apenas asumió, Javier Milei avanzó con la desregulación de la economía yerbatera: a pedido de la industria le quitó al Instituto la facultad de fijar precios de referencia para la hoja verde y la yerba canchada (seca, sin molienda), lo cual dejó a merced de la voracidad de la industria a más de 13.000 productores en un año donde hubo una cosecha récord.
Esta semana los yerbateros volvieron a reunirse y convocaron a asambleas para mediados de mayo. Además, pedirán reunirse con el gobernador Hugo alacqua, con el presidente Javier Milei, y con el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Sergio Iraeta, para plantearles el panorama que enfrentan.
Las buenas noticias para el sector vienen por el lado del mercado interno. Es que en el primer trimestre hubo una recuperación de casi el 10 por ciento en las ventas. En ese período salieron de los molinos 66.374.054 kilos, volviendo a cifras similares a la de los primeros trimestres de años anteriores.
Las exportaciones muestran un comportamiento similar a las del año pasado. Hasta fines de marzo partieron hacia el exterior 10.440.600 kilos de yerba mate, unos 135.000 kilos más que en el primer trimestre de 2024, año que cerró con despachos por 43,8 millones de kilos hacia diferentes mercados.
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