El amor se puede descubrir en un instante. Eso les sucedió a Raquel y Mario en el año 2011.
Él era un joven camarógrafo italiano, Mario Biondo, de 29 años. Ella es una de las estrellas de la tevé española, la famosa presentadora Raquel Sánchez Silva, de 39 años.
Se conocieron durante la grabación del reality Supervivientes, donde él trabajaba como cámara y ella como presentadora. Después de casi tres meses en Honduras, lo que comenzó a orillas del Caribe, terminó con un casamiento el 22 de junio de 2012 en Taormina, uno los lugares más bellos y top de Italia.
La cobertura fue inmensa. Fue el casamiento del año para la farándula en España.
En sus respectivos Instagram los novios, tras una boda cerrada para los curiosos, postearon sendas fotos mostrando felicidad.

"El día de mi boda", escribió Mario junto a una instantánea preciosa del Mediterráneo.
"El día de nuestra boda. Emocionados, rodeados de familia, amigos, felicidad. Un beso fuerte a todos desde Taormina", escribió Raquel.
A la mañana siguiente aparecía una foto de ambos en Twitter: "Marido y mujer, primer despertar...", escribió el marido de la popular presentadora.
Era el broche para un amor de película. La famosa y el bello. La opulencia y la modestia. Nadie imaginaría que un año después empezaría la tragedia.
¿Suicidio?
El 30 de mayo de 2013 se encontró el cuerpo de Mario Biondo "colgado" con un chal en la casa que habitaba junto a su mujer.
Raquel Sánchez Silva, quien de inmediato cortó relaciones con la familia de Mario, declaró que su esposo había muerto cuando realizaba juegos auto eróticos.
En 45 días la Justicia española cerró el caso. El 16 de julio de 2013 dictaminó que era un suicidio y todo quedó archivado.

Pero la familia Biondo no creyó la versión. ¿Porqué un muchacho de años, que estaba en la plenitud de su vida, con miles de proyectos, a horas de trabajar en Masterchef y a días de firmar un importante contrato de trabajo, se mataría?
Lo que al principio eran dudas, se transformaron en preguntas, luego en misterios sin respuestas y ahora, en la víspera de algo que está conmocionando a Italia y España, en casi una certeza: Mario Biondo fue asesinado.
Las fotos del cuerpo de Mario, tomadas por la Policía Científica española fueron reclamadas por la Justicia italiana y recién entregadas en enero de 2016. Y al verlas algo quedó casi en claro: Mario Biondo no se había suicidado.
Un amor efímero
La madre de Biondo, Santina, fue contundente: “Mi hijo recibió un golpe en la sien izquierda, quedó aturdido y fue estrangulado. Luego colgaron su cuerpo de manera burda, como si fuera un títere. No fue un suicidio, sino un asesinato”.
El amor solo había durado un año. Pero lo que se descubrió después es digno de un film de suspenso.

Solo un par de meses después y por boca de su hijo, los Biondo se habrían enterado que la pareja estaba en crisis. Esa mujer no era la soñada. Mario habría descubierto un pasado oscuro en su esposa que ni siquiera los medios españoles conocían.
Y la misma noche de su muerte, Mario habría buscado (¿y encontrado?) un supuesto video sexual de su esposa. Que hubiera destruido su estrellato si salía a la luz.
Todas las mentiras
La famosa presentadora, seis días después de la muerte de su esposo escribió un comunicado donde en una de sus partes decía: "hasta el día anterior no había entrado a mi casa, aunque sabía por unos amigos, que había muchas latas de cerveza y ceniceros llenos de cigarrillos consumidos".
¿Quién miente? ¿Raquel Sánchez Silva o sus amigos? Es que en las fotos se ve claramente que solo hay una lata en todo el comedor y es de una gaseosa, y los ceniceros están vacíos e impecablemente limpios.
La mamá de Mario fue otra vez contundente: "Mi hijo estaba recostado en el sofá. Al lado están sus pantuflas. En la mesa ratona estaban el control del televisor, el celular, una lata de gaseosa y un cenicero demasiado limpio. Mi hijo fue ahorcado por la espalda. La posición en rigor mortis durante horas, corresponde exactamente a la posición en la que lo dejaron muerto durante varias horas en ese sofá maldito".

Pruebas y más pruebas Mario fue un suicida sin motivo y que no dejó nota de suicidio. Pero su muerte dejó rastros que hacen crecer la idea que fue asesinado.
Los peritos nombrados por Italia, Giuseppe Iuvara (doctor especialista en Medicina Legal y de Seguros de la fiscalía de Ragusa) y Livio Milone (profesor de Medicina Legal en la Universidad de Palermo) coincidieron en que la instrucción española fue torpe y negligente y que la segunda autopsia arrojaba indicios suficientes para creer que Mario murió asesinado.
Y empiezan con un dato clave: ¿cómo no puede caerse la estantería donde se ahorcó Biondo? ¿cómo no puede haber caído ningún objeto de las estanterías? ¿cómo el chal con el que ahorcó estaba tan flojo que no podría haber ahorcado ni a un pajarito?.

Y los fiscales italianos descubrieron más: todo lo que se filtró de esa noche a la prensa española era mentira.
Se dijo que a las 2 de la madrugada Mario buscó en internet la dirección de un burdel. Lo increíble es que la pericia oficial muestra que Mario apagó su computadora a la 1.39.
Y no se sabe quién gastó 150 euros con su tarjeta crédito en el club Baronet de Madrid (un cabaret), tres veces aquella madrugada (a las 2.08, 2.25 y 2.53) cuando se estableció que ya estaba muerto.

¿Porqué de su computadora faltaban varios gigas de información?
¿Porqué minutos antes de su suicidio charló jocosamente con su hermana en Facebook">
Video
La viuda de Mario Biondo no sufrió la muerte de su esposo.
Y Raquel Sánchez Silva responde: "Le estoy diciendo que no me acuerdo".
En otra parte del interrogatorio le echa tierra su marido muerto: "fue Mario que llamó a alguien que vendía droga, pero no me acuerdo el nombre de esa persona". Pero el fiscal italiano le responde: "Usted tenía memorizado en su teléfono el nombre de esa persona".
La conductora dio la misma respuesta de siempre: "no me acuerdo".
En el mismo vídeo, Sánchez Silva insistía en que jamás vio a Biondo consumir drogas durante el tiempo que convivieron juntos. Sin embargo, en su declaración ante la Policía española había afirmado que su marido era "consumidor habitual".
Una ausencia notable
La conductora, participante de Masterchef Celebrity 5 en España y jurado de Maestros de la Costura, la noche en la que Mario perdió la vida dijo que estaba en la ciudad de Plasencia. Así lo declaró la viuda ante las autoridades y así consta en el auto oficial. Pero según el programa televisivo italiano "Le Iene" (nuestro antiguo CQC), la conductora haría pasado la noche en Madrid, en una fiesta dada por el empresario Kike Sarasola.
Pero falta el golpe de efecto final.
La familia Biondo contrató a la empresa Emme Team, experta en rastreo de direcciones IP's y uso de redes sociales, con sedes en EE.UU. e Italia.
La semana pasada tras un largo y minucioso trabajo descubrió que dos smartphones, además del utilizado por Mario, se conectaron durante el día de los hechos a sus cuentas de Facebook y Twitter, uno de los cuáles, utilizó la dirección IP de la vivienda que Biondo compartía con su esposa.

Conclusión: en la casa de Mario, aquella noche, había otras dos personas además de Mario. Los investigadores ya informaron en secreto quiénes acompañaban a Mario en el momento de su muerte.
Guiseppe, el padre de Mario, reveló que una de esas dos personas "es un hombre, que tiene cincuenta años y es cercano a la viuda". Y asegura que pronto se conocerá la identidad de la segunda persona que se conectó al wifi del domicilio de Mario.
El final se acerca y en España y en Italia todos esperan. La historia de amor sólo duró unos meses. Después fue tragedia y misterio. Pero el rompecabezas parece estar casi armado. Y la última pieza dirá toda la verdad.
GML