Tremendo respaldo de Flavio Briatore a Franco Colapinto en el arranque del GP de Imola: “Dicen cinco carreras pero no hay límite”

Hasta el jueves, Flavio Briatore disfrutaba del mar, tal como lo mostró en su cuenta de Instagram. Pero este viernes llegó al circuito de Imola temprano, a las 10 estuvo un rato en el motorhome de la Fórmula 1, ubicado justo al lado del de Alpine, y acompañó en el box a Franco Colapinto en su debut como piloto titular de Alpine en la pista del Autódromo Enzo e Dino Ferrari donde se disputa el Gran Premio de Emiligia-Romagna. Y también le dio confianza mediáticamente, cuando reconfirmó lo que el argentino le había dicho a Clarín un día antes: que esa fecha de vencimiento en el GP de Austria, el 29 de junio, no es tan real como se leía en el comunicado oficial de la escudería sa cuando anunció el reemplazo de Jack Doohan.

"¿Qué tiene de diferente esta vez? Que es cinco carreras y no se acaba... Bueno, no se acaba ni la temporada ni es que me van a bajar después, tranquila. Hay muchas cosas que veremos y se valorarán, supongo. No es que son solo cinco carreras. Veremos cómo va todo. Yo, en lo personal, estoy mucho más tranquilo", le dijo el piloto de 21 años a este medio en la charla con medios argentinos en el Media Day.

Las especulaciones comenzaron a crecer en el paddock y fue en diálogo con Sky Sports que el jefe de equipo intelectual (pero no material porque el asesor ejecutivo del Grupo Renault no posee licencia FIA, razón por la cual en Imola ese rol lo ocupa Dave Greenwood) lo confirmó 24 horas después: "Franco va a hacer las carreras que necesite. Leí que dicen que son 5 carreras, pero no hay límite".

El italiano, que fue infructuosamente ado por la prensa argentina este viernes en uno de los instantes que salió del hospitality de Alpine, también contó cuáles son las tres tareas que le dio al argentino para ganarse su lugar permanentemente: "Tiene que ir fuerte, no chocar y hacer puntos. Solo le pido estas tres cosas, no le pido diez. Si le hace bien, conducirá para siempre".

Parece tarea sencilla, pero no lo es. Esta mañana Colapinto terminó en el puesto 17 de la primera práctica libre del día después de girar 21 vueltas y empezar a familiarizarse con el auto y las configuraciones, uno de los primeros pasos en el objetivo mayor. Luego, acumuló más vueltas para llegar a un total de 50. Se espera que en el tercer entrenamiento, este sábado, con el conocimiento adquirido, exija un poco más el A525 antes de la clasificación, en la que por lo visto hoy puede aspirar a una Q2.

"Yo voy a ir paso a paso y al final después veremos dónde llegamos. Creo que mi objetivo es más que nada enfocarme en mí y no mucho en los tiempos ajenos. Y después eso que yo creo que por sí solo irá progresando. Hace mucho que no estoy en un fin de semana de carrera y estoy medio oxidado, quizás. Yo creo que me llevará un tiempito para acostumbrarme de vuelta y estar fino otra vez. Imaginate que Carlos (Sainz, en Williams) y Lewis (Hamilton, en Ferrari) hicieron cinco carreras y decían 'no, bueno, necesito un año más para acostumbrarme al auto'. Imaginate yo que no tengo ni una décima parte de la experiencia de ellos", comentó el piloto el jueves.

De todas formas está agarrando confianza. En los primeros giros del segundo entrenamiento ya se acercó más que antes a su compañero de equipo, Pierre Gasly, a la vez que trabajó junto a los ingenieros del equipo ajustando configuraciones y detalles del auto para aumentar lo que más se pueda el rendimiento del auto.

En un viernes auspicioso para Colapinto, Briatore también se refirió a Jack Doohan, quien estuvo como titular en las primeras seis carreras con un ritmo de carrera preocupante y un costoso accidente en Japón que le valió a Alpine un millón y medio de euros. "Debo decir que yo también esperaba más de Jack Doohan, quizá necesite un descanso", expresó sobre el australiano que sigue formando parte del equipo como piloto de reserva.

Aparte del cambio de pilotos, en Alpine hubo cambios en la jerarquía tras la repentina salida de Oliver Oakes, ahora ex jefe de equipo. "Su dimisión llegó después de Miami por un problema personal suyo. Cuando llegó tampoco me lo esperaba, pero nada cambia. El organigrama ha cambiado un poco pero el resto es igual. Cuando se habló de director de equipo, tengo que ver un poco la situación... Ahora me hago cargo pero estoy acostumbrado, no es mi primer día de colegio", recordó quien desembarcó en la F1 tras comprar el equipo Toleman y rebautizarlo como Benetton a finales de los '80.

"Este es un equipo cohesionado, la gente decía que me había peleado con Oliver pero no es verdad, tenemos una gran relación. Ahora estamos en Imola y es muy agradable volver a Italia después de tantos viajes", concluyó quien manejó los inicios de las carreras de Michael Schumacher y Fernando Alonso en la categoría y ahora tiene en sus manos el futuro de Franco Colapinto.